Aprovechando que estamos en estas fiestas navideñas os voy a presentar un trabajo que hicimos para el turrón más caro del mundo, el turrón 1880. Este trabajo lo hice yo junto a mis compañeros de grupo para la asignatura Sistemas y procesos de la licenciatura de Publicidad y RRPP.
El ejercicio consistía en qué nuestro anunciante, 1880, quería empezar a dirigir sus mensajes hacia el público homosexual, pero a la misma vez, no quería perder a su público de siempre, es decir, un público familiar y hasta incluso conservador.
Nuestra idea fue realizar un spot. El anuncio comenzaría con imágenes intercaladas de dos mujeres. Una de ella esta en casa, arreglándose, cocinando, cortando turrón 1880, preparando la mesa... La otra chica también esta arreglándose, sabemos que va a acudir a una cena, sale de casa, compra flores, una botella de cava, monta en su moto, llega a un bloque, sube las escaleras y llama al timbre, en el momento que llama al timbre vemos a la otra chica abrir la puerta y sonreír, pero en esa escena no se ve si su cita era la otra chica, el final de la historia lo dejamos a gusto del espectador.
Con este anuncio creemos que el sector homosexual se va a sentir identificado, sabemos que los homosexuales cuando ven un spot dirigido hacia ellos se sensibilizan mucho con la marca, ya que hasta hace pocos años ha sido un sector muy discriminado por la publicidad y por la comunicación de las empresas.
Al ser un anuncio “suave” y el cual deja el final para cada persona, el público conseguido por 1880 la familia y algunos conservadores no se sentirá “discriminado” ni atacado, aunque nunca se sabe que sucederá finalmente.
La idea ya se puso en práctica en varios anuncios publicitarios, pero en este caso particular se aplica muy bien al targets. Es interesante aplicar herramientas sensibles, el cliente se fideliza en corto plazo.
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